martes, 4 de septiembre de 2012

¿Cuánto perdemos por el retraso del proyecto Mutún?

Sergio Justiniano estuvo en el proyecto siderúrgico de la entonces Cordecruz entre 1980 y 1984. Trabajó en la industria del acero por 8 años en Argentina. Por su experiencia en el rubro, estuvo la anterior semana como panelista en el foro "El Mutún, un sueño pendiente", organizado por la UPSA, donde se analizó los motivos por los cuales se rompe el contrato de la Empresa Siderúrgica Mutún (ESM) y la Jindal, las perspectivas financieras y los futuros escenarios. Nos dio unos minutos de su tiempo para abordar un poco más del proyecto Mutún.

¿Cuáles fueron los inicios del proyecto del mutún?
S.J.: El proyecto siderúrgico del Mutún es antiguo. En el memorándum de 1904 los cruceños ya pedían que se lo explote. Esta inquietud Cordecruz la hizo propia en la década de los '80 y elaboró su propio proyecto para impulsar el desarrollo de la siderúrgica. Ahí fue que iniciamos contactos para hacer varios estudios de la zona. Por ejemplo, Mc-Kee (USA) en 1976, con la empresa Cobrapi (Brasil) en 1982 y varios otros, donde todos dicen que el proyecto es factible y viable.

Se dice mucho que no hay energía para el proyecto, ¿Qué opciones tenemos?
S.J.: Lo cierto es que nosotros tenemos la energía. Podemos encararla con carbón vegetal o con gas para la producción solamente de hierro de emisión directa, pero en el requerimiento del mercado local. Bolivia consume 400 mil toneladas de acero y para eso alcanza el gas que tenemos, para exportar no. Pero para eso podemos exportar minerales. Hay grandes empresas como la Vale do Río Doce, que solo se dedica a exportar minerales, y nuestro mineral es de muy buena ley.

Pero la ESM propuso hacerlo con carbón mineral...
S.J.: Es más caro, tiene azufre, lo que produce lluvia ácida. Pero los chinos producen "que da miedo" con carbón mineral. Nosotros nunca vamos a tener la producción china, por eso lo fuerte es que empecemos vendiendo mineral. Por otra parte, no es excluyente hacerlo con gas y hacerlo con carbón. Por ejemplo, en Argentina hay las dos cosas, al mismo tiempo.

¿Cuál es la mayor dificultad que tenemos con el mutún?
S.J.: El único problema del Mutún es que está a 2.000 km de los puertos, lo que dificulta en la logística del transporte. Esto es vital, por ejemplo, en el caso de la Vale do Río Doce, la empresa construyó un ferrocarril privado de 1.000 km, pero eso es con plata, y la Jindal no tenía plata o no le dio la gana de hacerlo.

¿Por qué fracasó el proyecto con la Jindal?
S.J.: En primer lugar, creo que nunca tuvo la voluntad de quedarse en Bolivia, sino haya vendido el mineral que acopió. Su gran problema fue que no consiguió mercado, no pudo penetrar los mercados internacionales. No necesitaba los 10 MMccd (millones de metros cúbicos) de gas, con 5 le sobraba.

¿Es cierto que la Jindal no está dentro del ranking de las grandes empresas siderúrgicas?
S.J.: Sí. Dentro del ranking de las 40 empresas más grandes e importantes a nivel mundial no figura la Jindal. La única empresa india que figura es la Tata Steel. Esperemos que la que dice el ministro que quiere venir no sea del mismo calibre de la Jindal. Son empresas que no tienen repercusión mundial y nosotros necesitamos empresas que tengan currículum para que puedan penetrar a mercados grandes.

¿Es posible disgregar la planta como lo propuso Ricardo Cardona (ESM)?
S.J.: Yo creo que el ingeniero Cardona está perdido en el tiempo y en el espacio, porque él no puede hablar de disgregar la planta. ¿Cómo va a llevar la laminación a La Paz o Cochabamba?. Esto no es factible por los enormes costos que ello implica, aunque técnicamente se puede.

¿Qué hacemos?
S.J.: Tenemos que empezar a industrializar el Mutún con lo que tenemos. Lo que tenemos es carbón... metámosle carbón vegetal. Se deben tomar ya las previsiones de sembrar eucalipto para tener lo necesario. La solución es utilizar el carbón vegetal, pero el gas no es excluyente, también se lo puede utilizar.

Se habló de no exportar más gas para utilizarlo en la siderúrgica. ¿Es posible?
S.J.: El Gobierno gana $us 7 por 1 MMccd y a la siderúrgica le tiene que dar a la mitad de precio, entonces no es negocio para ellos. Toda la producción de acero del mundo es por carbón mineral, no es con gas. De los 1.500 millones de toneladas de acero que se produjeron en el mundo ni el 1% es a gas.

¿Cuánto perdió Santa Cruz en estos 5 años?
S.J.: Los 5 años que estuvo la Jindal, son 5 años de frenar el desarrollo de Bolivia. ¿Cuánto representa eso en plata? Si hacemos un cálculo, pongámosle no más del 8% del PIB cada año de $us 50 mil millones, es harta plata. La industria siderúrgica viene a ser más o menos el 8% del PIB.

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