La voluntad política del Gobierno de impulsar el proyecto siderúrgico el Mutún será puesta a prueba el viernes en Puerto Suárez, Santa Cruz, donde debería firmarse el contrato con la firma china Sinosteel.
Para el representante de la Gobernación de Santa Cruz en el directorio de la Empresa Siderúrgica de El Mutún, José Luis Parada, la suscripción depende del Ejecutivo; igualmente, el nombramiento del nuevo presidente de la empresa estatal está en manos de las autoridades nacionales.
En contacto telefónico con EL DIARIO, Parada explicó que dos licitaciones públicas quedaron desiertas, y por tal motivo se tomaron otras opciones. Además, el directorio recibió la información de las empresas en competencia, así como el informe técnico de la Universidad Mayor de San Andrés, en la que indicaba que las dos propuestas que se presentaron a la invitación oficial tienen fallas.
Sinosteel propuso 450 millones de dólares para desarrollar el proyecto, mientras que su competencia, la firma Hennan, ofertó 419 millones. Y solo la primera quedó en el camino.
Parada informó que las observaciones que tenga Sinosteel las aclarará; tiene seis meses para adecuar toda la oferta en una sola propuesta y presentar el diseño final. La empresa china, asimismo, debe garantizar un buen producto y quedarse un año, dice el entrevistado.
El ministro de Minería y Metalurgia, César Navarro, también dijo que en el contrato que se firme con la firma asiática se incluirán varias cláusulas para garantizar la ejecución del proyecto.
GOBIERNO A GOBIERNO
Acerca de denuncias que llegaron respecto a que la firma china tiene deudas pendientes. La empresa tendría obligaciones por más de 10 mil millones de dólares, y en su país habría sido calificada como “empresa zombie”.
Varios expertos en el tema opinaron contra la decisión de contratar a la firma china, mientras otros indicaron que en el transcurso de las dos semanas, antes de la firma, deberá aclarar el tema de la deuda.
CRÉDITO CHINO
Parada señaló que el crédito es de Gobierno a Gobierno, los dos países avalan el pago y el crédito. Además, el Eximbank puede garantizar a la firma, ya que esta institución financiera internacional revisará las condiciones de la empresa para adjudicarse el contrato de explotación del Mutún, con la obligación de instalar una planta siderúrgica.
“Toda deuda de empresa pública la asume el Gobierno, en este caso el Gobierno de China” debe asumirlo, reflexionó el representante de la Gobernación de Santa Cruz, a tiempo de informar que hace poco el Ministro de Minería y el Eximbank se reunieron para tratar el tema. En la cita, la entidad financiera habría señalado que espera la firma del contrato para evaluar y ver la viabilidad del crédito.
OPCIONES
Por otra parte, la decisión tomada por los miembros del directorio fue difícil, ya que no tenían muchas opciones para decidir. Un de ellas era aceptar la firma del contrato para que arranque el proyecto y, la otra, esperar otros años para impulsar nuevamente la propuesta.
Parada explicó que el directorio tenía dos opciones, suspender y perder el crédito o esperar dos a tres años hasta que los precios internacionales mejoren, para que la propuesta para el hierro del Mutún mejore.
Respecto a la planta siderúrgica, el funcionario refirió que el proyecto prevé la instalación de una miniacería, casi como una planta piloto, y cubriría el 60 por ciento del mercado interno con su producción de .
Ahora el reto de las autoridades es invertir y hacer funcionar el proyecto; que sea eficiente. Y la decisión política empieza en nombrar al nuevo presidente de la ESM, para que firme el contrato este viernes 12 en Puerto Suárez.
La empresa deberá presentar sus planes medioambientales, la calidad del producto que se obtendrá, el proceso de la transferencia tecnológica, la certificación de la maquinaría así como la capacitación del personal, y para ello tendrá un año; periodo en el que tendrá que garantizar el trabajo y formar profesionales.
ANTECEDENTES
En 2006, el gobierno de Evo Morales adjudicó la licitación para explotar y explotar los yacimientos del Mutún a la empresa de la India Jindal Steel, después de expulsar a la poderosa EBX del multimillonario empresario brasileño Eike Batista.
En Puerto Suárez, Puerto Quijarro, el Pantanal boliviano y otros pueblos de la región, los habitantes no se explicaban de expulsión de la EBX que durante los gobiernos de Carlos Mesa y Rodríguez Veltzé habían comenzado a construir hornos.
En junio de 2007, el Gobierno firmó el Contrato de Riesgo Compartido con la Jindal Steel and Power, para la explotación del Mutún. A partir del contrato, la empresa debía instalar un equipo minero a cielo abierto, plantas de concentración, de peletización, de reducción directa para hierro “esponja”, para acería, una planta termoeléctrica y hornos de “cuchara” y “al vacío”.
Bolivia debía invertir en la construcción del tramo ferroviario y la habilitación de Puerto Busch, un total de 500 millones de dólares; y 300 millones de dólares para el gasoducto y 200 millones para el tramo ferroviario y habilitación del puerto.
El Mutún alberga 40.000 millones de toneladas de hierro; 10.000 millones de manganeso; níquel, piedras preciosas, caolín, columbita, tantalita, casiterita, calizas, etc.
Jindal Steel and Power ocupaba el escaño 112 entre las productoras de acero a nivel mundial y, en la misma India, se ubica en el 46 lugar. Comprometió inversión de 2.100 millones de dólares durante los primeros ocho años de explotación.
Por incumplimiento de ambas partes, se rompió el contrato y la ejecución de las boletas de garantía fueron ejecutadas por las autoridades nacionales.
DATOS
- Sinosteel y la empresa privada china Hennan fueron invitadas para presentar su propuesta y el Directorio de la Empresa Siderúrgica Mutún (ESM) se inclinó por la primera.
- El portal de Bloomberg informó que en octubre de 2015, y citado por Erbol, Sinosteel falló en pagar intereses de una deuda de 315 millones de dólares que colocó en bonos.
- Las dos licitaciones públicas quedaron desiertas, por lo que se optó por la invitación directa. Este 12 de febrero se firmaría el contrato con la Sinosteel.
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